Judo Aventuras 6

Hola a todos, una disculpa porque no he puesto nada en el blog pero es que los profes se pasan con la tarea, exámenes y todo eso. Cuando llegue su debido momento sabrán el por qué he estado tan ocupado, o sea en las entradas del 2033 porque así como voy me voy a atrasar unos 10 años con las entradas.
Le quiero dar las gracias a todos los que han estado al pendiente de mis actividades y lesiones, han sido muchos los fans que han escrito. Como ya dije, en su debido tiempo pondré la crónica completa de estos acontecimientos. De nuevo muchas gracias a todos.

Después de ser derrotado (una vez más) tuve que entrenar como loco, en cuanto a arenita ella estaba contenta con su primer lugar pero como dije en el capítulo anterior, no se fue limpia. Lo que pasó fue que se cayó, o por lo menos esa fue la versión oficial que le dio a todo el mundo (como en las noticias). La verdad fue que se lastimó un poco su piecito en la competencia y su papá la llevó al doctor, por esa razón anduvo con muletas. No sé cómo le creyeron que a los 2 días de haber competido se haya caído y luego llegar en muletas. Muchos no saben que la primera versión es falsa, de hecho la mayoría sabrá la verdad por medio de este blog.
Se acercaba el cumpleaños de Edgar y a Yadira se le ocurrió organizarle una fiesta sorpresa. Para eso yo era el encargado de juntar el dinero, teníamos una idea de lo que queríamos comprar y todo eso. Juntamos a muchas personas y hubo uno que otro gorrón que se fue sin pagar. Ahora contaré lo que muchos no saben o sea lo que pasó horas antes de la fiesta. Ese día me fui a dormir al anexo porque tenía mucho sueño, de repente llegó Edgar a dar sus clases de educación física. Recuerdo muy bien ese día porque todos asistieron para que les dieran sus promedios. Yo solo estaba como observador, Edgar se desesperó porque todos se le amontonaban para que él les dijera cuanto sacaron, algunos se preocupaban porque tenían 7 u 8, ni hablar de los de 6. Lo que los tontos no sabían es que su materia solo había que acreditarla con 6 y que no cuenta para el promedio, o sea que sacando 10 ó 6 es lo mismo. Se desesperó mucho ese día y si lo noté algo enojado por lo mismo. Alrededor de la una de la tarde estábamos algunos reunidos para comprar las cosas necesarias para la fiesta, como la pizza jeje. Kirby, Amauri, Sony, Alejandro (no es lobito) y yo fuimos los encargados para esa tarea que resultó un poco difícil.

El plan fue que nosotros estaríamos comprando las cosas en lo que los demás entrenaban sin mostrar ningún signo sospechoso. Obvio no cumplieron esa parte porque nunca falta el que no se enteró del plan completo o el que solo se apareció ese día para ver que estábamos haciendo. El punto es que cuando abandonamos la prepa nos dirigíamos para tomar un camión que nos llevaría al lugar donde compraríamos todo. Cuando le hice la parada el camión se siguió de largo por lo rápido que iba pero se paró del otro lado de la calle. Como vimos que nos estaba esperando decidimos correr, íbamos tan rápido que la gente se nos quedó viendo y cuando nos subimos al camión fue peor porque parece que lo íbamos a asaltar. Me explico mejor: Kirby y creo que era Sony o Amauri tenían de esas chamarras con gorro y ese día se les ocurrió ponérselo. Lo peor fue que Sony y Amauri se subieron por la puerta de atrás y los demás por la de enfrente, fue muy gracioso pero a la vez un poco vergonzoso. La parte chistosa no acabó allí, ya que Kirby pensó que íbamos al sams, así que cuando ella lo vio se paró muy rápido gritando “ya, aquí nos bajamos” e inmediatamente se puso en el botón para hacerle la parada al camión. Todos nos reímos de ella y Kirby se sacó mucho de onda hasta que alguien le dijo que no íbamos al Sams. Ella nos empezó a reclamar de que nos riéramos de ella pero la verdad fue algo indescriptible, esa expresión de “aquí nos bajamos” nunca se me va a olvidar. Llegando a nuestro destino original nos dimos cuenta que el dinero no nos alcanzaba y que teníamos que hacer recorte al presupuesto original. Al momento de querer pagar el marica del cajero nos dijo que no podíamos comprar que porque la credencial que traía no era de nosotros, y es que la credencial me la prestaron, pero aún así logramos comprar gracias a que la señora de atrás vio que era una estupidez eso. Recuerdo que la señora dijo “ay vecino, me hubieras dicho que ibas tenías fiesta” y yo me saqué de onda hasta que vi sus intenciones de ayudarnos, además de que le dijo al de la caja que nos dejara pagar. Le seguí amablemente el truco a la señora y hasta me dijo “nada más no pongas la música muy alto”. Como el señor del cajero no cedía, la señora ofreció usar su credencial para que pudiéramos pagar e irnos de allí. Debido a que las intenciones del cajero era hacernos perder el tiempo y hacerme enojar, le dijo a la señora que si hacía eso le pondría algo así como una amonestación pero a la señora le valió. Estuvo bien eso porque te das cuenta que aún hay gente buena en este país y que el señor ese no quería que sacáramos nuestra furia judoka. La parte de las pizzas fue un poco más fácil, solo que ahora me estaba llamando arenita preguntándome que todos estaban desesperados y que nos apuráramos, Edgar aún no sabía nada. Decidimos irnos en taxi, ya íbamos muy cargados y para acabarla de joder había tráfico. Las llamadas de “¿En dónde estás?” eran más frecuentes y más hartantes. Al fin llegamos, a pie pero llegamos, ya que Ale se ofreció a pagar el taxi solo que se me hizo mala onda que pagara tanto y mejor nos bajamos un semáforo antes y con el presupuesto judoka le di dinero. Al entrar a la prepa todos nos veían con sus ojos de “dame pizza” solo que obvio no les dimos, al fin llegamos y Edgar se sorprendió mucho y le gustó su sorpresa. Partimos pastel, comimos pizza, me agarraron de botana entre todos y otras cosas. Al preguntarle sobre si ya sabía que le haríamos su fiesta me dijo que sospecho algo cuando la gente que nunca viene apareció. Eso me recuerda que mi cumpleaños fue antes que el de él y me dieron mi pastelote de queso con fresa, era tan grande que me llevé algo a mi casa.

Como ya estoy hablando de mi sorpresa de cumpleaños (que fue 2 meses antes que el de Edgar) les contaré en breve como fue. En realidad lo que pasó fue que me dijeron que no entrara. Ese día no fueron tantos como el de Edgar y si hubo gorrones pero no importa porque del mío si quedó, estaba muy rico.
Retomando el transcurso de esta serie judoka, Solo me queda decirles que un día de Noviembre Edgar llegó con una hoja y con una noticia que sería muy importante para muchos. Algo que estábamos esperando para ver que tanto habíamos progresado. La importante noticia es…

Bueno como ya saben, es la parte en donde acaba la sexta parte de esta exitosa serie. Este capítulo es algo especial por lo que me pasó hace algunos días y también porque este año judoka ha sido más especial. Espero que en la parte 8 o 9 pueda escribirles todo esto que ha pasado. Son cosas que nunca creí que pasarían, buenas y malas pero a final de cuentas han sido parte del judo. Se lo dedico a todas las personas que han sido parte de mi camino como judoka. Espero que hayan disfrutado esta entrada.